
Sigo cantando para ver si alguien me escucha...
Desperté con una corchea en cada mano. Un poco de agua helada en mi pentacuerpo supondría normalidad. Nada...el día transcurrió y de a poco mis pies se transformaron en blancas, pisadas llenas de inocencia a dos tiempos. Me abandoné, sin quererlo me transformé en canción.
Y mi voz fue la letra, mi cabeza la creación y libre me sentí. Los pájaros se posaban en mis brazos; negras, silbábamos juntos al compás del día. Con entusiasmo, sin culpa me hice canción....
Hasta llegar a mi corazón que palpita en un sol mayor...
1 comentario:
y esa canción en la que te transformaste acabó, o sigue creandoce???
Publicar un comentario